El miércoles 18 de enero de 2023 ha marcado el final de una era para la plataforma de juegos en la nube Google Stadia. Tras un exitoso lanzamiento en 2019, la primera plataforma de juego en la nube del mundo ha anunciado el fin de sus operaciones.
¿Alguna vez te has sentido frustrado porque los juegos funcionaban más despacio o no lo bastante rápido en tu PC?
Google Stadia Cloud había nacido como la solución revolucionaria que necesitabas. El streaming fluido y los juegos a alta velocidad ya están al alcance de la mano; parecía una buena idea, pero el público no estaba de acuerdo.
Stadia Cloud de Google.
La nube Stadia es la plataforma de juegos en la nube de Google que te permite jugar a tus videojuegos favoritos en cualquier pantalla al instante.
Todos los contenidos se almacenan en los servidores de Google y el único derecho de los usuarios es conectarse y reproducirlos.
Originalmente, el sistema de comercialización de Google obligaba a comprar los juegos individualmente al precio de lanzamiento físico.
El servicio, que se lanzará en noviembre de 2019, está diseñado para permitir el juego en la nube en una variedad de dispositivos, incluidos PC, Chromebooks, Mac, iPhones y iPads.
Detalles de la interrupción de Google Stadia Cloud.
El anuncio ha sorprendido a muchos jugadores que aprecian la variedad de juegos disponibles en la plataforma, incluidos algunos títulos exclusivos.
El miércoles 18 de enero, Google cerró oficialmente su servicio de juegos en línea Stadia, que no estaba funcionando todo lo bien que debería. Los servidores de Google que ejecutaban el servicio se apagaron a las 23:59, hora del Pacífico.
Posibles razones del cierre.
Google Stadia prometió revolucionar la forma en que los jugadores disfrutan de sus títulos favoritos permitiéndoles acceder a ellos a través de cualquier dispositivo conectado a Internet sin tener que esperar a descargas o actualizaciones.
Por desgracia, no cuajó y no pudo competir con otros servicios de streaming como PlayStation, Now de Sony o Xbox Game Pass de Microsoft.
La decisión de cerrar el servicio de retransmisión de juegos se debió a la falta de interés de los usuarios y a su lenta adopción.
Una de sus promesas era que los jugadores podrían transmitir sus títulos favoritos a cualquier dispositivo desde cualquier lugar del mundo, lo que parecía un paso revolucionario para la industria.
El cierre de Stadia, la plataforma de juegos de Google, es sin duda un duro golpe para el sector y decepcionará a muchos jugadores.
Sin embargo, no debemos olvidar que fue un proyecto ambicioso que finalmente no alcanzó sus objetivos.
Google habla de devoluciones.
Después de que Google anunciara el cierre del servicio en septiembre de 2022, cumplió su promesa de devolver el dinero a todos los que hubieran realizado compras mientras Stadia estaba en funcionamiento, incluidos los juegos, los contenidos descargables y los mandos ofrecidos a través del servicio.
La empresa comenzó a tramitar las devoluciones en noviembre y había declarado anteriormente que esperaba procesar la “gran mayoría” de las devoluciones al final del partido de hoy.
La semana pasada, Google marcó el cierre publicando el último juego de Stadia, Worm Game, que los desarrolladores habían utilizado para probar el servicio antes de su lanzamiento.
En los meses previos al cierre, se clausuró la tienda Stadia y se suspendió toda actividad comercial en la plataforma Stadia, incluidas las transacciones de juegos.
En el sitio web de Google encontrarás más información sobre los reembolsos para los usuarios de Stadia.
Google confío en Stadia.
Google esperaba que su plataforma Stadia revolucionara la industria del videojuego y permitiera a los jugadores acceder a juegos de alta calidad sin tener que invertir en costosas videoconsolas.
Sin embargo, debido a su lenta adopción y a problemas técnicos, el servicio nunca alcanzó todo su potencial. Como consecuencia, Google ha decidido interrumpir con la plataforma está semana.
Este anuncio ha sorprendido a muchos jugadores que esperaban con impaciencia la desaparición de la plataforma.
Es otro ejemplo de cómo las tecnologías revolucionarias pueden fracasar a pesar de su potencial, y subraya lo importante que es una aplicación adecuada para su éxito.