El mercado de aplicaciones en dispositivos móviles ha avanzado mucho desde que Apple anunció iOS 2 y la posibilidad de que desarrolladores de terceros pudieran publicar aplicaciones en su App Store y monetizarlas. La idea, evidentemente, ilusionó a muchos usuarios, pero donde casi nadie participó es en gastar dinero por juegos de móvil. Así que esto y el jailbreak junto a Installous, supuso un problema para la industria que no esperaban. ¿Por qué la gente se gasta en un bar un euro por un refresco y un juego al que se le ha dedicado horas prefieren piratearlo?
La alternativa al problema fue publicar juegos gratis en el App Store, pero con condiciones
Actualmente, si merodeamos por el App Store, podremos encontrarnos con que los mejores títulos son gratuitos, pero ojo, si queréis ganar, tenéis que pagar. Supercell es mi ejemplo favorito para explicar este fenómeno, actualmente, tiene las dos apps más prestigiosas del App Store por su experiencia online y sobre todo, por el gran enganche que provoca a la mayoría de usuarios. Jugar al juego es completamente gratuito, pero si quieres ser uno de los mejores jugadores y evitar ser derrotado, tendrás que gastar una importante cantidad de dinero al día.
Así es como funciona ahora el mercado de aplicaciones, te dejan descargar el juego más adictivo de forma gratuita, te enganchas lo suficiente y cuando empiezas a perder batallas porque tu ejército tiene un nivel muy inferior al resto, y sobre todo, al de tus amigos, mucha gente acaba cayendo en este sistema y, para que veáis lo efectivo qué es, Supercell gana al día $5M solo con Clash of Clans.
Desde luego es muy rentable, además, estoy seguro de que si se vendiera por 9.99€ no tendría ningún tipo de público, así que debido al éxito de esta estrategia, es la que se usa hoy en día no solamente en dispositivos móviles, sino también en consolas. Otro ejemplo sería FIFA y su modo de juego Ultimate Team, que no tiene ningún tipo de diferencia con un casino, es igual de adictivo y llega a producir comportamientos ludópatas al jugador, pero claro, ¿para qué regularlo?
Empresas como Apple han sido protagonistas a la hora de devolver el dinero cuando un niño se excede con el dinero de sus padres que se gasta con este tipo de juegos win to play, pero lo cierto es que debería haber una regulación con este tipo de sistemas para que no sea tan sencillo caer preso en ellos, junto a todo el dineral que conlleva. Si sigue esta evolución en el App Store y demás mercados de aplicaciones ¿cómo será el próximo paso?