Si nos guiamos por los rumores que hemos escuchado durante los últimos meses, podemos pensar que el iPhone 7 será muy similar al iPhone 6s. Los únicos cambios de los que se ha hablado son la eliminación de las bandas de antena de la parte posterior del dispositivo, la sustitución del jack de los auriculares por un conector tipo USB-C y la incorporación de una cámara de doble lente que hará las delicias de los más fotográficos. Aún así, hay algunas razones para pensar que el gran cambio del iPhone llegará en 2017. Y es que el iPhone 8 podría depararnos un nuevo material desconocido hasta ahora para los amantes de Apple: el Liquid Metal®. Y ahora, la pregunta del millón: ¿qué es el Liquid Metal?
El Liquid Metal, también conocido como Vitreloy, es una serie de elecciones de metales amorfos desarrollada por un equipo de investigación de California y comercializado por Liquidmetal Technologies. Entre las características más atractivas, destacan una alta tensión de rotura, una excelente resistencia a la corrosión, un muy alto coeficiente de restitución y una excelente resistencia al desgaste. Es tan moldeable como el plástico, pero más fuerte que el acero. En definitiva, si el iPhone 8 fuera definitivamente fabricado con este material podríamos contar con un dispositivo muy resistente a rasguños, salpicaduras, arañazos o caídas.
El iPhone 8 estaría fabricado con un material tan moldeable como el plástico pero incluso más fuerte que el acero
Posiblemente te estés preguntando qué razones tenemos para creer que Apple puede estar planeando incorporar este gran cambio el próximo año. La principal razón es que en 2017 se celebrará el décimo aniversario del primer iPhone.
La segunda razón está relacionada con las declaraciones proporcionadas por el analista de Apple Ming-Chi Kuo. En marzo, el señor Kuo dijo que Apple podría abandonar en 2017 la carcasa metálica y adoptar una “carcasa de cristal curvado junto a una pantalla AMOLED“:
Esperamos que el modelo de iPhone presentado en 2017 adoptará un diseño estructural similar al del iPhone 4 / 4s, lo que significa que estará equipado concristal tanto en el anverso como en el reverso, y con un marco de metal rodeando los bordes. La diferencia es que el nuevo modelo estará equipado probablemente con pantalla curva y cubierta de cristal curvado, además de otras características importantes, incluyendo una pantalla AMOLED de 5,8 pulgadas, carga inalámbrica y reconocimientos biométricos faciales u otros (como ocular). Dado el diseño curvo, el nuevo modelo podría parecer más pequeño que el iPhone ya existente de 5,5 pulgadas.
Según desprenden estas declaraciones, el iPhone 8 sería similar en diseño al iPhone 4 y 4s, con metal en los lados y en la parte posterior. Si bien fue quizás el diseño preferido de iPhone por muchos, no creemos que Apple vuelva a un diseño tan pasado para un iPhone tan nuevo. Además, el iPhone 4 fue el iPhone más frágil jamás fabricado.
Este mes de abril, Kuo modificó sus predicciones e informó de que Apple incorporará “una estructura de cristal en el próximo iPhone 8”. El problema es que Kuo piensa que el cristal que incorporará será Gorilla Glass. Nosotros pensamos que está equivocado. Creemos que lo que está describiendo es Liquid Metal.
El Liquid Metal podría cambiar el diseño industrial de una forma nunca vista hasta hoy
No hay duda de que este material podría cambiar el diseño industrial de una forma nunca vista hasta ahora. Imagina por momentos que tu iPhone fuera prácticamente indestructible. Imagina que tuviera la apariencia de un metal brillante, pero que si se cayera o se golpeara con algo macizo no sufriera daño alguno. Imagina que no necesitáramos, además, esas líneas de antena tan feas nunca más. ¿No sería impresionante?
El Liquid Metal tiene las propiedades más deseadas por los diseñadores industriales, por lo que no es de extrañar que Apple pueda apostar por este material para sorprendernos en 2017 con el iPhone 8. Otra razón para creer en este gran cambio es el rumor surgido hace unos días que afirmaba que Apple planea usar “moldeo por inyección de metal” en la próxima generación MacBook, programada para ser lanzada este mismo año. Si resulta ser cierto, podría indicar que Apple está aumentando el uso de este material.
Llegados a este punto, sé lo que estáis pensando: “Sí, hemos oído hablar del Liquid Metal durante seis años y hasta ahora lo máximo que hemos visto es una estúpida ranura para tarjeta SIM”. Sí, tenéis razón. Sin embargo, trabajar con este material es muy difícil. De hecho, podría ser una de los retos más difíciles que Apple se ha marcado hasta la fecha. Pero antes de descartar por completo este rumor, pensad estas preguntas tan solo unos segundos:
- ¿Por qué Apple sigue renovando los derechos de uso del Liquid Metal exclusivamente en la electrónica de consumo?
- ¿Por qué Apple mantiene la declaración de patentes para el uso del Liquid Metal?
- ¿Por qué seguimos oyendo el uso de la palabra “cristal” para el gran rediseño del iPhone 8?
Apple nos tiene acostumbrados a tomarse con mucha calma el desarrollar nuevas tecnologías. Sin ir más lejos, el 3D Touch del año pasado les llevó muchísimos años, según Jony Ive. Si están trabajando para utilizar Liquid Metal como material base del iPhone es normal que se tomen un largo tiempo para hacerlo. De hecho, según una patente encontrada por Pantently Apple, Apple comenzó a trabajar con Liquid Metal en 2008. Es decir, hace 8 años.
Todas estas razones y más nos son suficientes para creer que Apple está planeando utilizar Liquid Metal en el iPhone 8, cuando se cumplan 10 años desde que Steve Jobs presentara el primer iPhone. Probablemente, en 2017, Apple reinvente el iPhone… por segunda vez.