No hace mucho tiempo el sinónimo de “computación” era Windows, pero gracias a la salida de los teléfonos inteligentes y a las tablets esos días han quedado atrás. Al día de hoy, Microsoft sigue estando igual de bien valorado, aunque siempre se le encuentran problemas (como a Apple, todo hay que decirlo). Eso no significa que el nuevo sistema operativo, el Windows 10, sea malo ni mucho menos.
Nadella se centra en Microsoft Office, el paquete de productividad más utilizado
En términos de empujar a la industria hacia adelante, sin embargo, Windows 10 no está haciendo mucho. El mercado del PC se sigue reduciendo. Microsoft todavía tiene una parte del mercado móvil (que cada vez es más pequeña) y el nuevo sistema operativo no parece estar haciendo nada para detener esta dinámica.
La buena noticia para Microsoft es que tiene un plan maestro, todo lo que hay que saber está contenido dentro de una sola frase del CEO de Microsoft, Satya Nadella, sacada de una entrevista en julio:
“Un gran error que cometimos en el pasado fue pensar en el PC como el centro de todo para todos los tiempos por venir”, dijo.
Microsoft básicamente dejó pasar por alto la revolución móvil. Mientras que iOS de Apple y Android de Google llegaron a crear nuevos ecosistemas, con un mercado muy importante de aplicaciones, Microsoft, con la guía de Steve Ballmer, no podía dejar de lado la idea de que Windows iba a ser así para siempre.
Ante la amenaza del iPhone, Microsoft se enfocó en Windows. El sistema operativo Windows Mobile existente fue por mucho tiempo una idea muy innovadora pero los esfuerzos para hacer frente a la creciente demanda de dispositivos táctiles a través del Windows 8 y el RT fueron un desastre.
En estos días Microsoft tiene una cuota de mercado del 3% en el sector móvil, mientras que el iPhone y los dispositivos Android son dos grandes éxitos; el teléfono de Apple tiene una cuota de mercado global más pequeña, pero es muy rentable, mientras que Android es el sistema operativo más popular del mundo. El año pasado 1.100 millones de terminales con el sistema operativo de Google fueron vendidos en comparación con cerca de 300 millones de PCs con Windows, de acuerdo con Gartner. También hay que señalar que no cuesta lo mismo un móvil que un ordenador.
Nadella no está cometiendo el mismo error dos veces. Mientras que Windows se ha vuelto menos relevante, Microsoft Office sigue siendo el estándar de la industria en ofimática.
Los trabajadores de oficina y estudiantes utilizan Microsoft Word, Excel, PowerPoint y el resto de la suite. Google Apps (recientemente rebautizado Google para el Trabajo) está proporcionando una competencia sólida, sobre todo en las empresas más pequeñas y en las nuevas de alta tecnología, pero en el mundo casi todas las grandes todavía tienen miles de licencias de Office, de ahí que Nadella se vaya a centrar en el que es ahora el punto fuerte de su compañía.
El nuevo plan del CEO de Microsoft es hacer Office irresistible para cualquiera, sin importar el dispositivo que se está utilizando.
¿Creéis que Microsoft despegará con las ideas de Nadella?