En Turquía, las redes sociales este lunes han sido víctimas de un bloqueo parcial tras una orden judicial con el objetivo de impedir a los ciudadanos el acceso a las imágenes del fiscal asesinado el pasado martes, después de haber estado secuestrado.
Escándalo en Turquía tras difundirse en las redes sociales fotos del fiscal asesinado
La orden ha sido emitida por un juzgado de Estambul y listaron una serie de enlaces que deben ser bloqueados para impedir que la foto siga rondando por la web. Es demasiado cruel, en la fotografía se muestra al fiscal Mehmet Selim Kiraz, secuestrado en el Palacio de Justicia de Estambul, con una pistola colocada en la sien. En esta orden se exige el bloqueo de páginas concretas y, de no ser posibles, de la página web al completo; pero por el momento, ha sido aplicado el bloqueo de forma arbitraria por los distintos servidores, mientras se negocia que todas las empresas se encarguen de retirar dicha imagen.
El atentado ha sido reivindicado por el grupo ultraizquierdista DHKP/C, que también difundió en las redes sociales la foto tomada por los propios secuestradores.
Según algunos diarios nacionales, Facebook se ha comprometido a eliminar la imagen y numerosos usuarios no notaron ni siquiera el bloqueo en sus dispositivos.
Por lamentable que parezca, no es la primera vez que pasa algo parecido en las redes sociales. Twitter ha evitado numerosos bloqueos judiciales al suspender cuentas de usuario tras recibir las peticiones respectivas de Ankara. En 2014 también sufrió un bloque por la Institución de Tecnologías de la Comunicación.
El cierre de Youtube se suma a experiencias similares desde 2007, lo que ha llevado a numerosos usuarios turcos a intentar remediarlo con formas para evitar estos bloqueos, como las que hace días yo mismo hablé en este post