Los números mandan, es así. Por ello, empresas como Apple siempre están en el banquillo siendo objeto de diversos estudios que intentan mostrar (o demostrar, en realidad) el estado económico y financiero de cada una de ellas. Ventas y producción, participación y beneficios del mercado, productos colocados y productos distribuidos, etc. Miles de índices son utilizados con ese objetivo.
En este sentido, el respetable informe anual de Strategy Analytics siempre tiene impacto, y más aún en la opinión pública, porque grafica justamente cómo se distribuye la gran masa de beneficios del mercado mundial de smartphones. Y, en este 2017, no ha sido la excepción.
El informe de Strategy Analytics grafica cómo se distribuyen los beneficios del mercado mundial de smartphones.
Las últimas estimaciones de la firma mencionada mantienen a Apple en la cúspide de las ganancias, capturando -un tremendo- 79,2% del total global de beneficios.
Así también lo asegura el medio Korea Herald, calcula que “la industria global de teléfonos inteligentes registró ganancias operacionales totales por 53.700 millones de dólares el año pasado”, de los cuales Apple habría obtenido 44.900 millones de dólares.
Apple se habría quedado con el 79,2% de los beneficios totales del mercado de smartphones.
¿Es algo positivo? ¡Claro! Sin embargo, y como en todas estas cuestiones, hay una posible lectura en sentido contrario. En años anteriores, Apple ha tenido participaciones que siempre superaron el 92% de las ganancias mundiales en smartphones. De hecho, en 2016, se especuló con números que incluso superaban el 100%, por los números negativos de otras grandes marcas del sector.
De todas maneras, lo único realmente cierto y evidente es que Apple (aún) cuenta con una salud financiera envidiable. Imagínense que, en comparación, el negocio de teléfonos inteligentes de Samsung -que aparece segundo en el informe- registró un beneficio operativo de (apenas) 8.300 millones de dólares el año pasado, lo que representó la nada despreciable porción del 14,6% de los beneficios globales, soportando incluso al fatídico Note 7. Tremendo.
Samsung, segundo, se habría quedado con el 14,6% de los beneficios, a pesar del Note 7.
La tercera empresa fue Huawei, que registró ganancias por 929 millones de dólares (1,6% del total). Luego aparecen Oppo, y Vivo. Lo que deja a las claras que, las marcas asiáticas, aún con su exponencial crecimiento, siguen siendo apenas rentables en comparación a las gigantes de la tecnología, Apple y Samsung.
Eso sí, el margen final de beneficios de Apple fue del 32,4% para el año, mientras que para Samsung fue del 11,6%.