Apple no deja de decir que los iPad, tanto los básicos como los modelos Pro, son ordenadores. Muchos no están de acuerdo en esta afirmación y responden de forma negativa a las campañas de la manzana mordida. Sin embargo, los iPad sí que hacen lo que un ordenador puede hacer, al menos en gran parte. Y es que, si hay un terreno en el que destacan las tabletas de Apple, es en el de la educación. Así lo hemos visto este mes en la keynote que celebraron, aunque no la retransmitieran. Por ello, veremos a continuación cómo podemos sacarle todo el partido a un iPad con iOS 11 y la suite iWork para la educación y para nuestro trabajo.
No es un ordenador, es un iPad
Nos hemos enfocado en verlo como un ordenador y hemos olvidado que es un iPad. Es un dispositivo desde el que podemos leer cómodamente. Nos permite trabajar con documentos, archivos y ciertos proyectos. Cuenta con infinitas apps para cualquier necesidad y uso. Es una pantalla ideal para consumir contenido y un dispositivo agradable, ligero y ultraportátil. Smartphone, tableta y ordenador en un mismo lugar, compatible con el Apple Pencil y teclados Bluetooth o (según el modelo) con Smart Connector. Podemos hacer mucho con este producto tanto para trabajar como para estudiar y ayudarnos en la universidad o el instituto. Y si lo conectamos con iCloud y empleamos las apps de la suite iWork, podremos hacer mucho más.
De entre todas las apps que utilizaremos en educación y trabajo, destacan las siguientes: Pages, Numbers, GarageBand, iMovie, Pixelmator, Procreate o GoodNotes. Según lo que estemos estudiando o las necesidades que tengamos, emplearemos unas u otras. Junto al Apple Pencil, podremos tomar notas y apuntes en nuestros documentos y en muchas apps. Es el caso de GoodNotes, que es lo más parecido a una plataforma en la que crear y editar libretas digitales. Ocurre lo mismo en Pages, Numbers y Keynote, que permiten pintar y dibujar sobre el documento, lo que se vuelve muy útil. La app de Notas ha mejorado en los últimos años y iOS 11 nos trae gestos y posibilidades infinitas. Gracias a la multitarea mejorada y a las nuevas funciones, como arrastrar y soltar, trabajar en un iPad nunca ha sido tan agradable y fluido.
Conoce las utilidades del iPad y olvida las limitaciones
Los usuarios profesionales que busquen edición de audio o vídeo a nivel avanzado, encontrarán limitaciones en las tabletas. Pero editar cualquier vídeo casero o menor y ajustar audios o podcasts sí está entre sus utilidades. Solo tenemos que encontrar las apps indicadas para ello y aprender a utilizarlas. Para el resto de tareas de cualquier estudiante o alumnos, este dispositivo será perfecto. Podemos elaborar y crear cualquier documento fácilmente y compartirlo, imprimirlo o subirlo a plataformas digitales. Investigaciones o estudio, contenido de todo tipo, lectura, productividad y organización.
Cuando decimos que no es un ordenador, decimos: afortunadamente. Porque, si bien un iPad no hace todo lo que haría un Mac, un Mac tampoco hace lo que el iPad. La posibilidad de olvidar el teclado y ponernos a pintar, tomar notas o escribir sobre la pantalla con apps profesionales es algo fantástico. Y no solo poder hacerlo, sino llevarlo a cabo con una precisión y una calidad impresionante.
Que cuente con cámara y potencia desmedida, además de un sistema operativo móvil, no es algo negativo, sino positivo. Fluidez, rapidez, instantaneidad y una interfaz apropiada para cualquier tamaño y cualquier modelo. Desde el iPad mini y el de 9,7 pulgadas hasta el de 12,9 nos darán una experiencia completa y única. Cada uno para una serie de necesidades y para un público diferente. Por ello, si conocemos las utilidades y las posibilidades que nos brinda este equipo, podremos olvidar las limitaciones. Mientras esperemos ver un Mac con el diseño de un iPad estaremos limitados, en el momento en el que veamos lo que puede hacer el iPad por nosotros, le sacaremos partido.
¿Es mejor un MacBook o un iPad para los estudiantes?
Depende mucho de qué tipo de estudiantes sean, qué busquen en su equipo y qué necesidades tengan. Si requieren de programas que solo están disponibles en macOS, tendrán que optar por el MacBook. Si no están limitados por el software o por utilidades exclusivas del sistema operativo de escritorio, un iPad puede ser su mejor opción. También influirá qué quieren hacer con su equipo y qué están buscando, pues es elegir entre una tableta y un ordenador. Sean más avanzados o menos y tengan más o menos funciones, no dejan de ser dos dispositivos diferentes.
En mi caso, utilizo a diario mi iPad Pro para estudiar y para trabajar. He logrado sustituir al ordenador prácticamente al 100%. Así, no me planteo comprar un MacBook, porque ya tengo un portátil fantástico con la tableta de 12,9 pulgadas y sus accesorios. Es mucho lo que me ofrece y sé cómo aprovecharlo. Destaco dibujar en la pantalla, ligereza y portabilidad, pantalla espectacular, facilidad de uso y la comodidad de trabajo. Todas las bondades de iOS 11 y de la filosofía de Apple en un mismo dispositivo. No es cuestión de escoger entre un equipo u otro, o un sistema operativo u otro, sino de sacarle el partido a cada uno y disfrutarlo.
En el caso del iPad, estoy convencido de que no hay un dispositivo u ordenador mejor para la educación. Adaptarlo a los centros y a los colegios es mucho más complejo que poner dinero sobre la mesa y repartirlo entre los alumnos. Necesitamos desde libros hasta contenido digital adaptado al temario. Sin embargo, por parte de Apple está todo hecho. Como ya hemos comentado, es un equipo increíble con posibilidades infinitas. Solo tenemos que aprender a usarlo, emplear las apps ideales para nuestras necesidades y descubrir sus bondades y su utilidad.
