Al mismo tiempo que llega la nueva e interesante línea iPhone 15, la semana llega también con una noticia de escándalo que refiere al iPhone 12. Organismos reguladores en Francia prohibieron la venta de este último modelo mencionado, pues la exposición del teléfono a la radiación supera los límites legales.
El caso iPhone 12 llega a Bélgica
La empresa recientemente negó esta conclusión. Sin embargo, esta noticia cada vez se eleva más y más, pues Reuters menciona que Bélgica ya está en proceso desde este día para poder analizar los riesgos que puede tener el modelo iPhone 12 para la salud.
Mientras tanto, el secretario de Estado en Bélgica mencionó que todo se debe enfocar en garantizar la seguridad de ciudadanos. En Reuters declaró que rápidamente ya contactaron con el IBPT-BIPT siendo el regulador para analizar concretamente el riesgo. Además menciona el secretario que esto estaría pasando por la lupa para otros teléfonos inteligentes de Apple, así como los de otras empresas.
Claro está que el iPhone 12 llegó por aquel 2020. Así que desde ese año, la empresa de Cupertino tuvo que realizar diferentes procesos para que el teléfono en un inicio saliera a la venta con las normas adecuadas de radiación y obtuviera la acreditación necesaria internacional de seguridad.
A pesar de esto, la prohibición de Francia inicio una avalancha de prohibiciones y revisiones por Europa. Pues puede ser que en Alemania esto también esté iniciando con una investigación posterior y ciertos grupos en España podrían estar iniciando campaña para eliminar el iPhone 12 de tiendas en el país.
De esta manera medianamente conveniente, la empresa ya dejó fuera de venta el iPhone 12 sin ningún motivo interno que mencionarán públicamente esta semana. Luego de llegar el iPhone 15, algunas versiones anteriores bajaron de precio. Por lo que el iPhone 12 dejó ya de estar en las gamas de venta. Así que puede ser solo parte de alimentar las teorías sobre la radiación.
Luego de esto y tras varios estudios que ya se llevaron a cabo durante este año. También cabe decir y revelar que no existen pruebas científicas que indiquen los niveles de radiación producidos por los nuevos modelos teléfonos que puedan infligir algún tipo de daño para la salud a las personas. Por lo que resta verificar más adelante la decisión de otros países.