Alan Turing es uno de los personajes más brillantes y, a la vez, más castigados de nuestra Historia. Considerado como uno de los padres de la informática moderna, sin sus aportaciones científicas en el campo de las matemáticas, la criptología o la computación, difícilmente habríamos alcanzado el grado de desarrollo tecnológico que tenemos en la actualidad.
Su contribución al mundo de la computación es tal, que muchos han interpretado el diseño del logo que Rob Janoff hizo para Apple en 1977 -el de la manzana arcoíris- como un homenaje al genio británico. Si quieres saber cuáles son las bases de esta teoría y qué hay de cierto en ella, sigue leyendo.
¿Quién fue Alan Turing?
Definir lo que hizo Alan Turing con una palabra es imposible. Principalmente fue matemático, pero también físico, criptógrafo, biólogo, filósofo y hasta atleta de maratón. Nacido en Londres en 1912, se le conoce popularmente por su trabajo con el ejército británico para descifrar los códigos que los nazis utilizaban durante la Segunda Guerra Mundial para sus comunicaciones a través de la máquina Enigma. Su trabajo permitió nada menos que la victoria de los aliados en el conflicto, sin embargo, su orientación sexual le condenó al ostracismo durante décadas.
Este episodio de la vida de Turing se hizo conocido gracias a la película Descifrando Enigma, de 2014, protagonizada por Benedict Cumberbatch, y solo por eso podría haber pasado a la Historia como uno de los grandes genios del siglo XX. Pero su aportación no queda ahí. Seguramente, aquello por lo que le tenemos que estar más agradecidos es por el desarrollo de la máquina de Turing, porque, tal y como explica el matemático Eduardo Sáenz de Cabezón, es en su modelo de computación en el que se basan todos los ordenadores de la actualidad. TODOS, incluidos los de Apple.
¿Qué tiene que ver el logo de Apple con Alan Turing?
Todos los grandes logos, los más reconocibles y universales, tienen una gran historia detrás, y la mayoría de ellas están relacionadas con la lógica pura. Es el caso, por ejemplo, de la pica de PokerStars, que utiliza un símbolo muy reconocible que se asocia rápidamente al mundo del poker; según las normas generales, todos los palos tienen el mismo valor, pero el as de picas siempre se ha considerado como la carta más importante de la baraja. También es el caso de la famosa “M” de McDonalds, que no solo hace referencia a la marca, sino que además imita a los arcos que caracterizaban la arquitectura de los locales en los que se vendían sus hamburguesas.
En algunas ocasiones, sin embargo, la explicación que hay detrás de los logos es mucho más peregrina y tiene más un valor sentimental que práctico. Ese es el caso del logo de Twitter. Pese a que el logo fue evolucionando bastante, desde el principio se trató de un pájaro azul, un color que se relaciona con la realeza; se llamó “Larry the bird”, Larry el pájaro, en clara referencia al Larry Bird. Uno de los mejores jugadores de baloncesto de la historia, también es un símbolo de los Boston Celtics, de los que Biz Stone, co-fundador de Twitter, es un gran fan.
Al ver la manzana original del logo de Apple, con su mordisco y los colores del arcoíris, algunos pensaron que, como en el caso de Stone y Bird, se trataba de un homenaje. Tradicionalmente, la manzana se relaciona con la inteligencia y la capacidad de pensar en otro nivel, dos cualidades que a Turing no le faltaban. De hecho, el primer logo de Apple, antes de que Steve Jobs tuviese que recurrir a Rob Janoff, era un detallista dibujo de un árbol con una manzana y un hombre debajo que representaba a Newton y que hacía referencia a la famosa anécdota que originó la teoría de la Ley de la Gravedad -y que nunca sucedió.
Imposible de reproducir a gran escala, Jobs encargó un nuevo logo a la agencia donde trabajaba Janoff, y él fue el autor de esa primera manzana multicolor que parece hablarnos directamente de Turing y su trágico final.
El trabajo de Alan Turing no solo no fue reconocido nunca, sino que este genio fue juzgado y condenado por las autoridades de su época por el simple hecho de ser homosexual. Se le dio a elegir entre la cárcel y la castración química, y Turing eligió la segunda. Dos años más tarde, a los 41 años de edad, se quitó la vida mordiendo una manzana envenenada -o al menos esa es la versión oficial, hay varias teorías al respecto. En la Universidad de Manchester, donde desarrolló su máquina de Turing, hay una estatua del científico sentado en un banco y sosteniendo una manzana mordida.
¿Por qué sabemos que el logo de Apple no tiene que ver con Alan Turing?
La respuesta a esta pregunta es fácil: porque así lo ha reconocido Rob Janoff.
La bandera multicolor que ahora asociamos a las reivindicaciones del colectivo LGTBI ya era utilizada a finales de los 70 por varios movimientos contraculturales, sin embargo, no fue ampliamente conocida hasta 1978. Eso es un año después de que Janoff diseñase el logo, por lo que resulta bastante improbable que ni siquiera supiese de su existencia.
Según ha comentado el propio Janoff, quien solamente conservó la manzana del diseño original, el color del arcoíris, que recientemente se pensó en recuperar, se debe a que quería resaltar el hecho de que el ordenador Apple II era el primero con pantalla en color. Añadió el mordisco por una cuestión de escala, porque así se notaba más que era una manzana y no una cereza u otra fruta.
Hubiera sido bonito que el logo de Apple fuera un homenaje a Turing, aunque es comprensible que no lo fuera. Durante décadas, pese a su relevancia, especialmente en el mundo de la computación, ha sido un personaje olvidado. De hecho, hasta 2013 no se le retiraron oficialmente los cargos por los que le condenaron en 1952. El mismísimo Steve Jobs lamentó que este homenaje no fuera real, y dijo sobre los supuestos vínculos de logo con Turing que: “No es verdad, pero ¡ojalá lo fuera!”.