Por fin tenemos con nosotros los nuevos Mac con M1 prometidos hace meses por el propio Tim Cook. Nuevos ordenadores con nuevos procesadores que romperán con años de ataduras con Intel y sus gráficas. Este cambio ha traído buenas impresiones sobre los nuevos ordenadores pero también hemos tenido que ver algunos inconvenientes. Veamos, en mi opinión que es lo mejor y lo no tan bueno de estas máquinas.
Los Mac con M1 son unas bestias del procesamiento y de la rápidez
El pasado día 10, en el evento que ofreció Apple y an el que se ofreció al mundo los nuevos procesadores M1 o Apple Silicon, nos dimos cuenta de lo bueno que son estos nuevos procesadores y de lo bien que hacen las cosas Apple cuando quiere y tiene interés en ello.
One More Thing. Es una realidad, tenemos procesadores nuevos y los Mac ya no dependen de Intel. Pero es una verdad a medias. Es algo más pero no como se esperaba. Al menos no en todo. Pero tiene cualidades excelentes.
El procesamiento es bestial. Es capaz de ofrecer operaciones por segundo hasta tres veces más rápidos que los anteriores modelos. Los procesamientos gráficos son hasta cinco veces más rápidos. Así podríamos seguir con una lista muy larga.
Al menos en el papel, los procesadores son unos verdaderos prodigios. Tendremos que esperar un poco más para poder determinar su verdadero poder. Pero desde luego me alegro fervientemente que Apple haya dado el paso que junto con macOS Big Sur, supondrá toda una revolución sin duda alguna.
Ahora bien, lo que mas me ha llamado la atención y lo que sin duda es un golpe impresionante a la competencia, es el rendimiento de la batería en los nuevos Mac. Estamos hablando que en el MacBook Pro de 13 pulgadas, el mismo puede estar en funcionamiento nada mas y nada menos que 20 horas.
Es una autentica pasada con el que podremos hacer casi cualquier trabajo sin apenas preocuparnos de buscar un cargador. El rendimiento del ordenador se traducirá en un mayor rendimiento para sus usuarios. Toda una ventaja ahora en estos tiempos que estamos casi todos tele trabajando.
Muchas novedades increíblemente buenas. Tambien hay cosas menos buenas que hay que señalar.
No todo es de color de rosa con estos procesadores M1. Aunque son realmente rápidos, fiables y estables tengo que decir que hay cosas que no me gustan demasiado. Aunque es algo normal, cuando la novedad está encima de la mesa. Inconvenientes que deberían haber eliminado, pero hay que romper la cuerda por algún lado, para que el futuro prospere.
Uno de los grandes inconvenientes es que las eGPU externas ya no funcionarán con estos nuevos procesadores. Se juega mucho Apple, es una apuesta arriesgada. Está diciendo al mundo que no son necesarias ya, que toda la potencia necesaria la aportará el procesador M1.
Muchos usaban esas gráficas para dar una potencia extra a sus ordenadores en determinadas ocasiones y para trabajos muy arriesgados y complejos. Veremos si ahora se puede hacer lo mismo con menos.
Otra de las cosas que me han gustado poco, es ¿por qué se limita la RAM a 8GB en el MacBook Pro de 13 pulgadas? Si elegimos la versión de Intel, podremos llegar hasta los 16GB. La relación de Apple con la capacidad de la memoria RAM es algo de estudio detallado de verdad. Imaginaos si con la capacidad del M1 le añadimos una memoria de 16 o 32 GB. Tendríamos un Mac Pro en miniatura y portátil. ¿Qué quiere Apple?. Si lo que quiere es que la gente que quiera un Pro no pueda pagarlo, lo ha conseguido.
No voy a entrar en las discusiones sobre la no existencia de modificaciones exteriores en los ordenadores, que es algo que a mi personalmente me saca de quicio. La verdad es que podrían haber usado esta ocasión para poder lanzar al mercado al go nuevo de verdad. Acorde con un Mac con M1. Pero no, eso lo dejan para más adelante, cuando hayan hecho negocio con estas primeras versiones.
Al fin y al cabo todo es cuestión de dinero. Apple es una empresa, se debe a sus usuarios y a sus accionistas. Siempre buscan un equilibrio y casi siempre se consigue. Vamos a esperar a esos informes y pruebas de nuevos Mac con M1.