Nuevos estudios evidencian una vez mas, la capacidad del Apple Watch para medir el estado de salud de su usuario. No sólo es capaz e detectar caídas involuntarias y avisar a servicios de emergencia o detectar problemas de corazón. Un nuevo estudio avalado por la Universidad de Stanford afirma que es capaz de medir el estado de “fragilidad del usuario” que lo lleva.
Cuando hablamos de fragilidad hablamos de unos estándares para evaluar la movilidad funcional
La Universidad de Stanford ha publicado los resultados de un nuevo estudio del Apple Watch y el iPhone centrado en la movilidad funcional de los pacientes con enfermedades cardiovasculares. Los datos sugieren que el iPhone y el Apple Watch pueden evaluar con precisión la “fragilidad del usuario”, tanto en la clínica como en casa.
El estudio fue financiado por Apple. Consistió en 110 pacientes que usaban de manera continuada usando un iPhone 7 y un Apple Watch Series 3. Los datos se recopilaron a través de una aplicación de estudio, VascTrac, y también de forma pasiva.
La prueba usada es el estándar 6MWT
La prueba 6MWT es una medida común de fragilidad, las puntuaciones más altas en esta prueba son indicativas de “una función cardíaca, respiratoria, circulatoria y neuromuscular más saludable”, según Apple.
Es una prueba submáxima de esfuerzo cardiorrespiratorio. Consiste en medir la distancia máxima que recorre una persona sobre una superficie plana en un tiempo de 6 minutos.
Semanalmente la prueba se realizaba en casa a través de la aplicación VascTrac. La aplicación recopiló pasivamente datos de actividad, como recuentos diarios de pasos. La regresión logística con selección de características directas se utilizó para evaluar datos pasivos y 6MWT en el hogar como predictores de “fragilidad del usuario” medidos por el estándar supervisado 6MWT.
El estudio encontró que un Apple Watch puede evaluar con precisión la fragilidad con una sensibilidad del 90% y una especificidad del 85% en un entorno clínico. En un entorno no supervisado, las cifras bajan hasta el 83% y una especificidad del 60%.
El Apple Watch es un instrumento capaz de determinar la predisposición de una persona a sufrir determinados problemas cardiacos:
En este estudio observacional longitudinal, los datos de actividad pasiva adquiridos por un iPhone y el Apple Watch fueron un predictor preciso del rendimiento en la clínica de 6MWT. Este hallazgo sugiere que la fragilidad y la capacidad funcional podrían ser monitoreadas y evaluadas remotamente en pacientes con enfermedades cardiovasculares. Esto permitiría un monitoreo más seguro y de mayor resolución de los pacientes.