Nuevos rumores indican el 2018 como el año elegido por Apple para el cambio de la tecnología LCD IPS a OLED en la pantalla del iPhone, a dar la noticia fue esta vez el sitio japonés nikkei.com. Luego de las recientes especulaciones del Korea Times que señalaron a Samsung como el probable proveedor, esta vez la empresa indicada es la también coreana LG quien sería la encargada para la futura producción de las pantallas OLED.
Según nikkei.com, la sociedad asiática estaría planificando una actualización de su capacidad productiva cuyo fin sería la obtención de números que estuvieran a la altura de los pedidos de Apple. Para esto necesitarían garantizar una producción de alrededor de 200 millones de pantallas para el teléfono inteligente de Apple, cosa realmente ardua, por ende los de Cupertino podrían optar por la separación de la producción en dos empresas (como ocurrió este año con los procesadores A9); la alternativa estaría en la oferta de dos líneas, al menos durante el primer año, una con pantallas LCD y la otra con los nuevos modelos OLED. Personalmente creo que esta última hipótesis es algo remota porque implicaría un desdoblamiento de precios y seguramente muchísimas críticas.
LG Display, entonces, planificó una muy costosa expansión de la línea productiva OLED para su fábrica de Paju en Corea del Sur, de todas maneras falta todavía bastante tiempo como para poder tejer hipótesis realmente plausibles.
OLED, AMOLED, LCD IPS
Los paneles de LED Orgánico tienen un funcionamiento muy diverso al de los clásicos LCD. Se trata de una tecnología basada en el carbono (de allí el adjetivo), con pequeños LEDs orgánicos (uno por cada pixel) que pueden emitir luz propia en base a la estimulación eléctrica recibida; la primera ventaja respecto a la tecnología LCD radica en la ausencia de un panel de retroiluminación para proporcionar luz al panel de pixeles. Las pantallas OLED ofrecen una serie de pros y contras respecto a los LCD, los puntos críticos son principalmente su costo y la saturación de colores (quien haya visto una pantalla OLED o AMOLED sabrá a lo que me refiero).
Las pantallas OLED desde el punto de vista técnico representan el futuro, ya sea en dispositivos móviles como en televisores: necesitan en general menos energía para funcionar respecto a los LCD porque emiten su propia luz, por ende se ilumina solamente el pixel utilizado y no necesita de un panel retroiluminado. Un pixel negro, lo será porque simplemente está apagado y no oscurecido como en el caso de los LCD, esto proporciona un contraste muy elevado y un consumo energético nulo con obvias ventajas en lo que se refiere a la batería. No por nada los dispositivos que utilizan este tipo de panel usan y abusan de los fondos negros en sus respectivas interfaces gráficas.
Las pantallas OLED han madurado lo suficiente como para integrarlas en un iPhone
Entre los productores, la empresa líder en la utilización de este tipo de pantallas (en lo que se refiere a dispositivos móviles) es Samsung, que emplea displays OLED de matriz activa denominados AMOLED, compuestos por una estructura de transistores integrados en la pantalla, hay al menos dos transistores por cada pixel. Estos displays son más complejos y costosos pero ofrecen imágenes más luminosas y definidas respecto a aquellos de tipo pasivo.
Gracias a las tecnologías implementadas principalmente por Samsung a través de los años, los paneles OLED garantizan ángulos de visión similares a aquellos de los mejores LCD IPS y han mejorado notablemente la saturación de colores respecto a los de hace pocos años, sin llegar, por el momento, a los niveles de los paneles IPS.
Tanto los OLED como los LCD IPS dan buenos resultados bajo la luz del Sol, con una leve ventajar para los IPS en virtud de la retroiluminación que, según el modelo, puede ser muy intensa. El punto fuerte de los OLED es el de la profundidad de los negros que genera, además, un contraste mucho más elevado respecto a los LCD IPS.
Sólo queda esperar y ver si realmente Apple dará este salto, de hacerlo y como ocurrió con el Retina Display, veremos en un futuro toda su gama de productos (Mac, iPhone, iPad) utilizando esta tecnología, pero para esto habrá que mejorar varios aspectos, entre ellos la fidelidad de los colores, uno de los puntos de fuerza de las pantallas de sus dispositivos.