Todos hemos dicho en la alguna ocasión que si se nos olvida la cartera en casa podemos pasar sin ella, pero si se nos olvida el teléfono, nos volvemos a casa independientemente de dónde estemos. Hasta ese punto hemos llegado a necesitar el iPhone. Tenemos dependencia del mismo y es necesario poder desprenderse de esa necesidad, pero Apple no los va a poner fácil y ahora te cuento por qué.
El iPhone ya no es el dispositivo sólo para navegar en Internet y redes sociales. Ahora nos controla cada minuto
El iPhone ha pasado de ser el dispositivo que nos permite hablar con otras personas o mandarnos mensajes, incluso ha dejado de lado ya que podamos navegar. Estamos en una nueva era, en la que podemos hacer casi cualquier cosa con el móvil y además tenemos la posibilidad de que nos controla. No me refiero a que nos sigue todos nuestros pasos, si no que dependemos de el y nos controla.
El sólo hecho de decir que me volvería a casa a por el iPhone porque “ahí es donde tengo todo” denota que dependemos de él. Podemos hacer tantas cosas con él, que si te paras a pensar, es difícil determinar lo que hacemos sin la intervención del teléfono. Tenemos la posibilidad de pagar con el terminal, de hecho hay aplicaciones que funcionan sólo con el teléfono. Podemos acceder a aplicaciones de salud y concertar citas, seguimiento de la actividad física, ahora además quiere que ahora sea quien nos avise de nuestras necesidades médicas advirtiendo de la necesidad de tomar o no una pastilla.
Todo eso ha hecho que el iPhone se convierta en una herramienta necesaria. Pero no debemos perder la perspectiva y saber que es eso, sólo una herramienta. El teléfono se ha convertido en algo necesario si, pero hay que luchar contra que sea imprescindible.
Apple quiere que sea, que se convierta en un dispositivo del que dependamos. Estoy hablando desde la perspectiva de una opinión personal. Pero para mi está claro. Si la empresa consigue que el iPhone sea indispensable y nos dudemos en darnos la vuelta a por él en caso de olvido, sin importar donde estemos , con eso habrá conseguido que quieras siempre tenerlo contigo. Algo que degenerará en un uso intensivo y por tanto un desgaste temprano que conducirá a renovar el terminal más a menudo.
Es algo lógico, Apple es una empresa y debe sacar beneficio de sus dispositivos. Para el resto estamos nosotros. Somos los usuarios los que debemos poner un poco de freno a esta situación. Sí debemos mejorar y sí debemos buscar que las cosas se hagan de manera más fácil. Pero nunca tenemos que dejar que nos acaparen nuestro tiempo y sobre todo no nos hagan pensar que sin él no podemos hacer nada.
Ahora se acerca el periodo estival, las vacaciones son un buen momento para probar cosas diferentes y ver si podemos desprendernos de esos iPhone. No bajar con ellos a la piscina o a la playa. Dejarlos en el apartamento o la casa y disfrutar de otras cosas. Ahora bien, ya os digo que eso lo puedo hacer yo con el iPhone, pero que hay un dispositivo, que me tiene atrapado y no se si podré dejarlo un poco de lado. Ya os lo contaré.