La diferencia entre el ‘look’ de un fotograma de una película de cine con el ‘look’ de una fotografía de las que hacemos todos los días con un iPhone, es mayormente, la textura y los parámetros relacionados con la sensibilidad de la “película”. Aunque el tema es mas profundo, resumiendo diré que para que nuestras fotografías cotidianas hechas con un iPhone (por ejemplo) tengan un aspecto de fotograma de película de cine, hay que modificar y ajustar principalmente la gamma, la colorimetría y la textura de la foto en cuestión.
Estos y otros parámetros los vamos a ver uno a uno y vamos a aprender a hacerlo tomando una fotografía de ejemplo hecha con un iPhone o cámara digital, que convertiremos con Pixelmator y nuestro Mac en un fotograma que parecerá haber sido rodado con una cámara de cine (es indiferente si es HD o película química y que el aspecto será el mismo).
Para que se entienda bien lo que vamos a hacer, voy a partir el tutorial en al menos dos partes, con el fin de que cada paso que demos, tenga sentido y una justificación clara. En el primer tutorial de “Cómo crear el aspecto de película de cine en tus fotografías”, vamos a ver que es lo que necesitamos hacer para lograrlo, y en la segunda parte, haremos el ejemplo práctico.
Cómo crear el aspecto de película de cine en tus fotografías con Pixelmator
Cuando tomamos una fotografía con un iPhone, nuestros amigos de Apple se aseguran de que la imagen quede perfectamente capturada. Para ello, ajustan y controlan los parámetros de las imágenes de manera que la exposición, colorimetría y otros ajustes son siempre correctos. Además con el sistema HDR lo que consiguen es mejorar la calidad de la imagen ya que toman diferentes exposiciones de la misma imagen (la cantidad de exposiciones tomadas depende de la imagen) y nos ofrece una imagen final que combina todas esas exposiciones. Si eso se hace así, técnicamente la fotografía es prácticamente perfecta. Pero el problema de este tipo de ajustes automáticos, es que están pensados para que toda la imagen sea “legible”… pero ¿y donde queda el lado artístico?. En la vida real existen sombras, hay sitios y zonas oscuras…. ¿porque nuestras fotos siempre han de ser brillantes y con mucha luz y mucho color? ¿porque falsean la realidad? Pues para asegurarse de que la foto queda correctamente expuesta.
Que una foto quede correctamente expuesta es justo lo que hay que hacer. El problema es que de manera automática, en vez de iluminar la escena, el iPhone o cámara digital lo que hace, de alguna manera, es alumbrarla (subir los niveles de luz de la escena en general). De esta manera ellos se aseguran una buena exposición en toda la imagen, pero le quitamos el dramatismo, las emociones, las sensaciones… todo queda prácticamente eliminado y plano, ya que alumbrar es anti-iluminar. Como yo digo, alumbrar es simplemente dar luz (a lo bruto), e iluminar es dar luz con sentido y respetando los ambientes y emociones para transmitirlos al “espectador”. De ahí que en una película de cine se trata de iluminar y transmitir emociones y demás, y para hacer fotos correctas con un iPhone, puede valer con solo alumbrar la escena (por ejemplo eso es lo que hace el flash). Pues nada, para hacer que nuestra foto parezca un fotograma de una película de cine, habrá que iluminar la foto respetando las sensaciones, cual director de fotografía, y no simplemente alumbrar para que la foto se vea bien. Pero… ¿Cómo se hace esto si la foto ya está hecha con un iPhone en automático y no hemos tenido en cuenta nada de eso?
En el post de mañana veremos el ejemplo práctico con una fotografía real hecha con un iPhone y la modificaremos, pero como adelanto os resumo los pasos que hay que dar para lograr el objetivo propuesto.
Afortunadamente, y aunque la foto hecha con el iPhone ya está registrada, tenemos suficiente margen como para llevar esa foto a nuestro terreno. Lo que haremos es modificar la gamma de la fotografía, es decir, indicarle donde quedará situado el ‘color’ más negro de la foto y donde quedará situado el más ‘color’ blanco de la imagen. Con ello ajustaremos toda la gama de grises de la foto. Solo con hacer esto, notaréis como cambia el aspecto de la imagen. En cine o televisión HD, se tiene siempre presente el contraste de la imagen. No hay nada que quede ahí sin estar previsto, por ello, situar el negro y el blanco de la imagen es una de las claves principales que garantizan una correcta exposición y un contraste atractivo para el espectador. En las fotografías automáticas, la gama es mas elevada justo para hacer que las partes mas oscuras queden “iluminadas”. En nuestro caso, buscamos el efecto contrario, es decir, lo que es oscuro se ha de ver oscuro y lo que es claro se ha de ver claro (y así con toda la gama de grises)… así de simple y así de real.
Tras modificar la gamma, haremos un truco interesante que empezará ya a cambiar la textura de la imagen y matizar muy mucho el contraste. Con eso ya podremos divisar la imagen de cine en nuestra foto. Pero hay mas, le daremos el formato correcto a la imagen para que tenga el aspecto panorámico típico del cine, modificaremos la colorimetría dándole mas presencia a los tonos azules en las sombras de la imagen y subiremos los tonos cyan en las luces. Añadiremos ruido a la imagen para darle mas aspecto a película de cine y también sombrearemos los limites de la imagen para dar mas realismo….
En fin, que en el post de mañana haremos todo esto y algo más usando una foto, nuestro Mac y Pixelmator (también sirve Photoshop o apps similares). El objetivo es que una foto hecha con el iPhone quede con un aspecto de fotograma de película de cine…. Id pensando o haciendo una foto para esto. Por cierto, solo se admiten fotos tomadas en horizontal, no sirven fotos verticales. Seamos serios… jejejeje.