Apple se enfrenta a feroces críticas por parte de los futuros compradores del nuevo MacBook Pro. Además de las supresiones de las características, la empresa con sede en Cupertino también se enfrenta a plazos de entrega más largos de los habituales. Algo que ya sucedió con el stock de iPhone 7 Plus y la variante negro brillante.
El MacBook Pro de 2013 fue el inicio de la supresión
No cabe duda que Apple está haciendo lo posible para optimizar el espacio dentro del propio ordenador, como lo que sucedió con la supresión del puerto firewire, ethernet, unidad óptica y el soporte para el candado Kensington. A pesar de ello, el gran público recibió el delgado y estilizado portátil con muy buena cara. Esto es debido a que los elementos que suprimieron no eran sumamente necesarios para la mayoría de usuarios, como la unidad de disco óptico, ya en desuso. Siendo hoy el día en el que la mayoría de automóviles se fabrican, sin soporte para CD. A pesar de ello, el haber eliminado el puerto ethernet cuando aun existían redes cableadas en la mayoría de empresas no fue un acierto por parte de los de Cupertino.
MacBook Pro sin lector de tarjetas SD, MagSafe, etc
Sin lugar a dudas la estrategia de Apple por simplificar el diseño ha llegado a un punto de no retorno. Muchos de estos portátiles son usados por fotógrafos amateur, con lo que se les complica el poder transferir sus fotografías directamente desde la tarjeta SD a su nuevo MacBook Pro. Por otro lado, se entiende fácilmente la crítica por buena parte del público alternando el MagSafe por un cargador con conector USB-C. El MagSafe fue aclamado por los usuarios, dotándoles de una mayor seguridad ante las posibles caídas, que no son pocas, a pesar de ello, Apple ha decidido despedirse de él.
Pantalla OLED en el MacBook Pro
Sin embargo, no todos son fallos, también existen grandes aciertos. Este es el caso de la pantalla de LED orgánico que dispone el nuevo MacBook Pro, con lo que nos permite una mayor rapidez a la hora de usar nuestro equipo.