Los coronavirus están haciendo estragos en China, y lamentablemente se están expandiendo. Se trata de una familia de virus que ya afectó a miles de personas (los fallecidos serían más de 400) y que ha llevado a la Organización Mundial de la Salud a declarar un alerta mundial. Es por ello que países y organizaciones han tomado medidas preventivas como cerrar aeropuertos y filiales.
La expansión de los coronavirus podría afectar la producción de teléfonos inteligentes…
De hecho, Apple ha cerrado todas sus tiendas físicas chinas hasta el próximo 9 de febrero. Pero podría extender la medida. Es más, en su reciente presentación financiera, advirtió a los accionistas de que no estaba claro cuánto impacto tendría esta “situación de salud pública” en los números de la empresa, por lo que propuso un rango de ingresos esperados más amplio de lo normal (para justamente contener posibles caídas en China).
Y por si fuera poco, se sumó al baile el reconocido analista Ming-Chi Kuo. Quien, en su nueva “predicción”, asegura que los coronavirus afectarán a la cadena de producción (y envíos) de iPhone durante el primer trimestre, y puede que también durante el segundo.
Según Kuo, la producción de teléfonos inteligentes se podría ralentizar sensiblemente. Y la causa sería específicamente la expansión de los coronavirus. Si bien especula con que, muy pronto, Apple presentará varios dispositivos (como el iPhone 9), el especialista advierte que podrían haber serias complicaciones.
Ming-Chi Kuo asegura que los coronavirus afectarán a la cadena de producción (y envíos) de iPhone durante el primer trimestre, y puede que también durante el segundo…
Las primeras medidas apuntarían a una caída de, por lo menos, un 10%. Lo que colocaría a Apple en el mercado con una disponibilidad de 35 a 40 millones de iPhone durante el primer trimestre. Pero no termina allí, porque el analista incluso se anima a decir que el segundo trimestre podría ser igual de complicado.
Todo dependerá de cómo avance la grave epidemia surgida en Wuhan, China.
Sin perjuicio que lo más importante es la salud de las personas afectada; a nivel comercial, deriva en un nuevo golpe para las expectativas de Apple en uno de los mercados más importantes. A la caída global de ventas, la guerra comercial de Trump y el país asiático, la disputa alrededor del 5G y las limitaciones que le impusieron a la importación de piezas chinas, se le suma ahora esta gravísima cuestión de salud pública que la obliga a reorganizar su negocio.
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