¿Esperabais una revolución para el sistema operativo móvil de Apple? Lo siento mucho, pero coincido con mis compañeros de iOSMac cuando afirmo que iOS 12 no es la panacea. Apple ha querido mostrarlo como algo impresionante con muchas novedades y mejoras, pero el hecho de cambiar la nomenclatura es muy cuestionable. Es cierto que trae muchas funciones y mejoras que se agradecen, pero ¿de verdad tiene tantas novedades o son solo pequeñas modificaciones? A continuación analizaré a fondo esta actualización tan deseable como cuestionable.
iOS 12 pule y mejora, pero no innova
De todo lo que nos mostraron en la keynote de la WWDC 2018 podemos destacar varios anuncios. Entre otros, la mejora de rendimiento, la búsqueda en Fotos, los Atajos de Siri, el rediseño de apps nativas y el control del tiempo que utilizamos el dispositivo. También anunciaron nuevos animojis y los memojis, así como llamadas grupales en FaceTime, lo cual es curioso y llamativo, pero poco útil. Se agradece que den este pequeño paso y que lleguen por fin algunas de estas funciones, pero no son propias de un “nuevo sistema operativo”. Son lo que veríamos en una versión menor. Es decir, que estaríamos hablando de un iOS 11.5 y no una versión 12, como la han nombrado.
No es más que una estrategia de marketing. Está claro que iOS 12 es un buen sistema operativo y que mejorará nuestros dispositivos, pero es el mismo que conocemos. Arreglan fallos, pulen funciones que llegaron con iOS 11 y modifican el aspecto de apps como iBooks. Poco más. De hecho, no es casualidad que empezaran la presentación hablando de este sistema. Es siempre el más atractivo y el que más ojos tiene puestos encima, pero este año no tenía mucho que mostrar. Tal y como dijeron los altos cargos de la manzanita, es mejor pulir y asegurar que todo vaya bien a lanzar novedades y cambios sin control y que luego no funcionen correctamente.
¿Qué ocurrirá cuando llegue iOS 12 a todos los usuarios?
Tiene un muy buen rendimiento, según la primera beta, y está claro que será mejor que iOS 11.4. Aunque no cambie gran cosa, es muy recomendable actualizar. Siempre lo es por motivos de seguridad, sincronización y funcionamiento, pero en esta ocasión aún más. Lograrán cifras increíbles de adopción y podrán presumir de estabilidad y de pulido del sistema, si siguen cuidando estos aspectos, pero también tiene su desventaja este sistema. Esta desventaja es la ausencia de grandes anuncios o grandes focos de interés. Siri trae Atajos y pequeñas mejoras, pero en español no va a cambiar tanto. La competencia no pisa los talones de Apple, sino que les ha sacado la delantera.
Mientras que los demás siguen avanzando a un ritmo lento pero seguro, Apple se ha tomado un año de “descanso” para pulir y mejorar lo existente, antes de lanzar grandes novedades. Tendremos que esperar doce meses más para que traigan algo que realmente cambie y revolucione la experiencia de usuario. Algo que compita con Samsung, con la inteligencia artificial de Google y con el mercado en general. Parece que este año, aprovechando la llegada de un software estable y completo, tendrán que competir presentando nuevo hardware.
En la WWDC 2018 no hemos visto ni nuevos iMac, ni MacBook, ni los iPad Pro ni un iPhone SE. En otoño lanzarán la actualización de hardware de todos estos productos y sorprenderán con nuevos diseños y cambios significativos. Y, el año que viene, será otro cantar. Mientras veremos qué hace la competencia y qué tal evolucionan las betas de iOS 12 y macOS Mojave.