Poco a poco, vemos cómo los usuarios adoptan los nuevos sistemas operativos. Se optimizan, se eliminan errores y fallos de seguridad y se introducen muchas mejoras. Todo ello hace que los usuarios esperemos con ansia y deseo las nuevas actualizaciones. Sobre tood cuando estas son tan grandes como las que suponen una nueva nomenclatura. Es el caso de iOS 11, que si bien no introduce muchas novedades en iPhone, sí lo hace en iPad. Desde septiembre, que llegó la versión pública y definitiva de iOS 11, se ha extendido por todos los dispositivos móviles. A continuación veremos las cifras de usuarios con el último sistema operativo y la velocidad de adopción que ha logrado Apple.
iOS 11 se extiende, a su velocidad
Bien es cierto que la cifra dada por AppleInsider es muy positiva. Afirma que iOS 11 está en el 65% de dispositivos móviles compatibles del mercado. Habría crecido un 6% con respecto a diciembre. Sin embargo, esta cifra no es tan buena si la comparamos con los datos de años anteriores. Y es que, iOS 11 se extiende, pero a su velocidad. Los usuarios podrían empezar a presentar dudas a la hora de actualizar a la nueva versión, sobre todo para los dispositivos antiguos que se pueden ralentizar.
iOS 9, a estas alturas del año, había logrado la increíble cifra del 75% de los dispositivos móviles. Por su parte, iOS 10 logró superar esta cifra alcanzando el 76%. En cambio, la versión número 11 se mantiene en 65%. Esto da que pensar. Cada vez más usuarios y más dispositivos activados está generando una variedad y una serie de problemas a los que Apple tendrá que hacer frente. Quizás deban controlar mejor las actualizaciones y perfilar detalles del software antes de lanzarla al público.
Los problemas de iOS 11 y Apple
Cuando salieron las betas, todo eran buenos comentarios. Cuidaba bien la batería, para ser una beta; funcionaba muy bien; casi no presentaba fallos… Y cuando salió la definitiva, nos decepcionaron terriblemente. Fallos, problemas de batería, bugs y problemas de velocidad en dispositivos antiguos. Todo esto se ha visto incrementado con el escándalo de las baterías en los iPhone. Apple ralentiza dispositivos con la batería dañada o desgastada para mejorar la experiencia, lo que ha supuesto una serie de críticas, demandas y problemas para la compañía. Con todos estos problemas y con la mala imagen que está teniendo iOS 11, es normal que muchos se resistan a actualizar.
Veremos a lo largo de los próximos meses si crece este porcentaje, así como hasta dónde llegan con ello. Si lo pensamos, no falta tanto para la WWDC, donde se presentaría iOS 12. Los usuarios no habrán actualizado a la versión número 11 y ya estaremos viendo las novedades de la siguiente. ¿Habrá llegado la hora de cambiar los plazos de las actualizaciones?