Pues si, tener los datos en la nube es una práctica muy habitual hoy en día, pero tiene cierto riesgo si tus archivos son notablemente sensibles, ya que realmente no tenemos todo el control sobre ellos… ¿Te fías de estos servicios ajenos a ti y a tu sistema de seguridad propio?. Me explico, tú en tu casa o en tu empresa puedes tener los datos guardados como quieras, esto puede ser, haciendo copias de seguridad diarias en discos duros externos. Esos discos duros externos pueden estar fisicamente en tu casa y/o negocio o podrías guardarlos lejos (a unos cuantos kilómetros) para evitar perderlos por catástrofes o incendios y accidentes similares. Es un trabajo, eso es cierto.
Subir los datos a la nube, es muy práctico, porque tienes tus datos “lejos” (a salvo de las cosas que pasen en tu casa o negocio) pero esos datos realmente están en manos de otros. Esos otros, obviamente es cierto que están dándote un servicio y se han comprometido (vía contrato) a salvaguardar tus datos y su privacidad, pero no es menos cierto, que podría haber mala fe por parte de alguien y tus datos podrían caer en malas manos. Los hackers están continuamente haciendo ataques a sitios web como estos para conseguir datos y burlar los sistemas de seguridad, así que ciertamente los servicios en la nube, son un caramelito para los hackers y maleantes informáticos.
Tus datos en la nube… ¿A quien le confías tus archivos más sensibles?
Si tienes poca cosa y no eres muy fan de subir datos sensibles, seguramente te preocupe poco lo que pase con tus datos si caen en manos ajenas con malas intenciones, pero ¿qué sucede si tus datos son ciertamente sensibles?. Pueden ser datos en forma de fotos personales y/o comprometidas, datos de tus cuentas, datos de tus negocios, tu lista de contactos (algunos profesionales importantes, por ejemplo), etc… así pues, subir los datos a la nube lleva implícito el “fiarte” del sitio a que le confías tus archivos.
Puedes elegir hasta 2 servicios de almacenamiento en la nube.
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